Tendencias de marketing 2024: 11 expertos analizan el futuro del sector
Diseño: muy, pero que muy pequeños
Índice
¿Son unos auriculares caros siempre mejor que unos económicos?
Ficha técnica de los Sony LinkBuds
SONY LINKBUDS | |
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DIMENSIONES Y PESO | Auriculares: 4,1 gramosEstuche:41,4 x 48,5 x 30,9 mm – 34 gramos |
UNIDAD DE DIAFRAGMA | 12 mm |
SONIDO | Respuesta en frecuencia: 20-20.000 HzMuestreo: 44,1 kHzDSEESBC, AAC |
CONEXIÓN | Bluetooth 5.2A2DP, AVRCP, HFP, HSP |
COMPATIBILIDAD | iOS, Android |
BATERÍA | N/D |
AUTONOMÍA | Auriculares: hasta 5,5 horasEstuche: hasta 12 horas |
CARGA DEL ESTUCHE | USB tipo C |
EXTRAS | IPX4 |
PRECIO | 179,99 euros |
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Diseño: muy, pero que muy pequeños
A la izquierda los Sony LinkBuds y a la derecha los Apple AirPods Pro.
Como siempre hacemos, empecemos por el diseño. Los Sony LinkBuds son unos auriculares que, según Sony, han sido fabricados en ABS reciclado proveniente de piezas de automóviles fabricados en Estados Unidos y Japón. Su tacto, sin embargo, es agradable. Hay plásticos y plásticos y estos auriculares se notan verdaderamente bien trabajados. Están disponibles en gris y en blanco.
Lo primero que nos llama la atención, además de la forma del driver, es su tamaño. Son extremadamente pequeños. Para ser más precisos, son un 51% menos voluminosos que los WF-1000XM4 (algo que tampoco es difícil, porque estos últimos son bastante grandes) y pesan 4,1 gramos. Casi nada. Son muy, muy ligeros y apenas notamos que los llevamos puestos.
Los Sony LinkBuds no se introducen en nuestro canal auditivo y se fijan mediante unas gomillas de silicona, sino que se encajan en la oreja y se encajan a la misma con un anillo de fijación de silicona superior. El anillo tiene un pequeño puente que se fija por debajo del antihélix (el pliegue interior de la oreja) y, como cada oreja es un mundo, Sony incluye varios anillos de diferentes tamaños para que usemos el que mejor nos quede.
En cada auricular hay una serie de micrófonos y un sensor de movimiento que, como veremos más adelante, permite que hagamos gestos sin tener que tocar el auricular. No obstante, la zona principal de los auriculares, esa pequeña joroba, tiene una superficie táctil que podemos usar para interactuar con la música. De todas formas, volveremos a esto más adelante.
Y ahora hablemos de ese driver circular. ¿Por qué? Porque Sony ha querido crear unos auriculares que nos permitan estar siempre al loro de nuestro entorno. Por ejemplo, mientras teletrabajamos, estamos en la oficina o, simplemente, vamos por la calle sin querer desconectar del todo. Su solución consiste en unos auriculares cuyo driver tiene forma de anillo y, por lo tanto, permite que el ruido de fuera siga entrando. A esa forma se le suman una serie de funciones adicionales que abordaremos en mayor profundidad en el siguiente apartado.Es importante probar todos los anillos para encontrar el que mejor se adapte a nuestra oreja
En el día a día, este driver con forma de donut lo encajaremos en la concha de la oreja y se fijará a la oreja usando el puente del anillo que mencionábamos anteriormente. Puede no parecer intuitivo y, de hecho, no lo es, pero una vez lo colocamos en su sitio podemos ver que los auriculares no se mueven, no se caen y que, aunque la toma de contacto es algo extraña, son realmente cómodos. No obstante, dependerá de las preferencias de cada usuario. Yo, por ejemplo, me siento más cómodo con los intraauriculares.
Dicho lo cual, hablemos del estuche. Si en los WF-1000XM4 Sony consiguió reducir el tamaño con respecto a los 1000XM3, con este estuche ha ido un paso más allá. El estuche es un 26% más pequeño que el de los 1000XM4 y un 17% más ligero, pesando tan solo 34 gramos. Es muy pequeñito y apenas abulta en el bolsillo. Es funcional, sencillo y, básicamente, cumple con su función.
A diferencia de otros estuches, este no tiene cierre magnético, sino que cuenta con un anclaje que liberamos mediante el botón frontal. ¿Punto positivo? La tapa no se abre salvo que lo queramos nosotros. ¿Punto negativo? Abrirla es un poquito más tedioso. Sigo pensando que la tapa deslizante de los Soundcore Liberty Air 2 Pro es la mejor implementación que he visto hasta ahora, pero insisto, es una preferencia personal.
En la parte frontal tenemos un LED que nos indica el estado del emparejamiento y en la parte trasera un botón para resetear o vincular a un nuevo dispositivo y el puerto USB tipo C para cargar el estuche. Y no, el puerto USB tipo C no está centrado. Este puerto es el que usaremos para cargar el estuche, ya que, desgraciadamente, carece de carga inalámbrica.
Experiencia: háblame, que llevo los auriculares
Pasamos así a hablar de la experiencia, un apartado que siempre comienza repasando la compatibilidad. Los Sony LinkBuds usan Bluetooth 5.2 y son compatibles con iOS y Android. La aplicación que usaremos para sincronizarlos con el móvil es Headphones Connect (cuya beta, proporcionada por Sony, es la que hemos usado nosotros para el análisis).
También se pueden conectar al ordenador o una tablet, pero ojo, que no tienen conexión multipunto. Además, cabe destacar que son compatibles con Google Fast Pair (Android) y Swift Pair (Windows 10) y que tienen asistente de voz integrado, a saber, Google Assistant o Alexa. Esto último es interesante, ya que podemos usar las palabras clave “OK Google” o “Alexa” para dar órdenes desde los propios auriculares.
Dicho esto, hablemos de los gestos. Lo que Sony ha conseguido es impresionante. Los auriculares son pequeños y, aunque podemos tocar sobre ellos para pausar la música o cambiar de canción, notaremos que al hacerlo la sensación de golpe en la oreja es bastante pronunciada. ¿Cómo ha evitado Sony que esto pase? Con el punteo en gran área (que se puede activar o desactivar desde la app).
¿Y eso qué es? Los auriculares tienen un sensor de movimiento frontal que detecta los toques entre la mejilla y la oreja. Dicho de otra forma, para pausar la música podemos darnos dos toques en la cara, justo delante de la oreja, donde estarían las patillas, para interactuar con los auriculares. Parece magia cuando lo haces por primera vez y, a la larga, resulta algo sorprendentemente cómodo.
Funciona de miedo, no hay ruido de impacto y, además, se evitan los toques fantasmas. Los gestos disponibles son los siguientes y cabe destacar que no se pueden personalizar. Es decir, podemos cambiar entre los diferentes modos disponibles, pero no elegir qué acción concreta hace cada gesto.
DOBLE TOQUE | TRIPLE TOQUE | |
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CONTROL DE REPRODUCCIÓN | Reproducir/pausa | Canción siguiente |
CONTROL DE VOLUMEN | Aumentar el volumen | Bajar el volumen |
SELECCIONAR LA CANCIÓN | Canción siguiente | Canción anterior |
FUNCIÓN DE ASISTENTE DE VOZ | Iniciar la función de asistente de voz | Cancelar la función de asistente de voz |
AMAZON ALEXA | Entrada de audio | – |
Por otro lado, desde la aplicación podemos acceder a un ecualizador con varios presets y modos personalizados, a la configuración de 360 Reality Audio (requiere de una app compatible), a DSSE y a una opción que nos permite modificar la calidad de conexión Bluetooth para priorizar la estabilidad o la calidad de sonido. Recomendación personal: calidad de sonido.
Otra función interesante que tenemos es “Speak to chat”. Esta permite a los auriculares identificar cuándo estamos hablando para pausar la música. Dado que están pensados para teletrabajar y seguir pendiente de nuestro entorno, es de lo más útil. Funciona realmente bien y filtra bien el sonido de nuestra voz y otros tipos de ruido. Además, podemos ajustar la sensibilidad.
Si estamos escuchando música y hablamos, la música se detiene y se queda parada hasta que pasamos cierto tiempo en silencio (de nuevo, ajustable). Es muy útil para poder tener una conversación sin necesidad de quitarse los auriculares. Algo llamativo es que detecta hasta los tarareos, así que, si os gusta tararear canciones, ajustad la sensibilidad para reducirla. Si os gusta más silbar, tranquilos, que los silbidos no paran la música.
La última función que merece la pena destacar es el sonido adaptativo. Si lo activamos, los auriculares ajustarán el volumen al ruido ambiente. Por ejemplo, si estamos en la calle y pasamos al lado de una obra con mucho ruido, el volumen aumentará. De la misma forma, si vamos en un bus con el volumen alto y nos bajamos a la calle, más tranquila, el volumen se reducirá. Si queréis hacer la prueba en casa, probad un vídeo de YouTube con sonido ambiente de cafetería. Veréis la diferencia.El sonido adaptativo detecta muy bien los cambios en el ruido del entorno y ajusta el volumen en función del mismo
En lo referente a su uso para escuchar música mientras estamos pendientes de nuestro alrededor, los auriculares cumplen con su objetivo. Su peculiar driver con forma de anillo permite que el sonido entre, lo que nos permite, por ejemplo, ver (y más importante, escuchar) un video de YouTube e incluso una videollamada sin quitarnos los auriculares. Es un dispositivo peculiar, estamos de acuerdo, pero cumple con su función: ser unos auriculares para el día a día y permitir que nos comuniquemos con otras personas sin quitárnoslos.
Calidad de sonido: Sony sabe lo que se hace
Hasta aquí todo bien, pero ¿cómo se escuchan estos auriculares? Pues lo cierto es que realmente bien para ser unos auriculares así de abiertos. Para ponerlos a prueba, hemos usado los Sony LinkBuds conectados a un iPhone 12 Pro usando nuestra biblioteca personal de canciones (siempre a 320 Kbps, que es lo máximo que despacha Spotify) y una batería de temas estándar que puedes consultar aquí.
Cada auricular tiene un driver de 12 milímetros con forma de anillo y su rendimiento es muy bueno. Los auriculares tienen un DAC incorporado, un amplificador y el procesador V1, que ya conocemos del WF-1000XM4 y que se encarga de optimizar la calidad de sonido, así como de darle vida a la tecnología DSEE. Esta, por cierto, sirve para restaurar los sonidos de alta frecuencia que han sido comprimidos.Son compatibles con los códecs SBC y AAC, por lo que no están preparados para escuchar música HiFi
Si bien es cierto que no se escuchan al nivel de los XM4, los LinkBuds de Sony consiguen ofrecer una experiencia sonora muy equilibrada. Los graves están bien representados, sin llegar a ser estridentes o demasiado exagerados, algo propio de este tipo de dispositivos. Tienen cierta pegada, pero sin llegar a retumbar. Sea como fuere, al tener ecualizador integrado, podremos ajustar las frecuencias para retocar el sonido y adaptarlo mejor a nuestras preferencias.
Los auriculares también representan correctamente las frecuencias medias y agudas, respetando el sonido de las guitarras en temas como ‘Bloody Valentine’ (Machine Gun Kelly) o ‘Hero of War’ (Rise Against) y la voz en canciones más melódicas como ‘Spanish Harlem’ (Rebecca Pidegon). El sonido es muy limpio y, si hacemos el ejercicio correcto, podremos identificar perfectamente los instrumentos de las canciones y la escena sonora.
Si bien es cierto que, dada la idiosincrasia de estos auriculares, no vamos a poder aislarnos en la música como sucede en los dispositivos con cancelación de ruido que sellan el canal auditivo, podemos confirmar que ofrecen una experiencia realmente satisfactoria. Son de esos auriculares que se disfrutan muchísimo, con el extra de productividad que mencionábamos anteriormente.A pesar de no sellar por completo el canal auditivo, los Sony LinkBuds consiguen ofrecer una buena experiencia sonora
En cuanto a la calidad de las llamadas, los auriculares disponen de una tecnología de captación de voz que usa el feedback de varios micrófonos para procesar nuestra voz, así como un algoritmo de inteligencia artificial que reduce el ruido ambiente. El resultado es bueno, pero no el mejor. Nosotros escuchamos a nuestro interlocutor sin problema, pero él nos escucha bien, aunque con cierto matiz metálico en la voz. Suficiente para hacer llamadas, pero sin ser los mejores auriculares en este terreno.
Batería: más de media jornada laboral
Cerramos el análisis hablando de la batería, uno de los puntos clave de este tipo de dispositivos. Como de costumbre, Sony no ha desvelado el amperaje de sus auriculares. Lo único que sabemos es que, según la firma nipona, son capaces de ofrecer hasta 5,5 horas de música con una sola carga. Ciñéndonos a nuestras, podemos decir que la cifra es precisa.
Dependerá del volumen que usemos, pero por norma general, a un volumen medi-alto la autonomía oscila entre las cuatro horas y media y las cinco horas y media. Eso, dicho de otra forma, es suficiente para echar media jornada sin tener que pasar por el estuche de carga, aunque lo más normal es que los metamos y saquemos del estuche varias veces durante el día.
En cuanto al estuche de carga, su comedido tamaño nos permite obtener 12 horas adicionales, es decir, unas dos cargas completas más. De nuevo, dependerá del uso que hagamos. El estuche cuenta con un sistema de carga rápida que en diez minutos permite obtener hora y media de reproducción de música, así que ni tan mal. Finalmente, cabe destacar que el estuche no tiene carga inalámbrica, sino que depende exclusivamente del puerto USB tipo C.
Sony LinkBuds, la opinión de Xataka
Tras haber probado los Sony LinkBuds, podemos concluir que son unos auriculares de lo más interesantes, sobre todo para aquellos usuarios que teletrabajen y no quieran aislarle por completo o bien estén en una oficina y quieran seguir pendientes de lo que sucede alrededor. También son recomendables para aquellos usuarios que no gusten de tener una gomilla de silicona encajada en su canal auditivo, porque no, los intraauriculares no son para todo el mundo.Aunque no son unos auriculares para todos los públicos, los Sony LinkBuds son muy solventes y, como poco, únicos en su especie
El rendimiento de los auriculares es excelente en casi todos los aspectos. Se escuchan realmente bien, el sistema de gestos es muy intuitivo y está bien implementado y, por si fuera poco, son cómodos. El problema, claro está, es que no tienen cancelación de ruido, por lo que, si estás buscando aislarte y disfrutar de la música sin distracciones, estos auriculares no te lo van a poder ofrecer.
180 euros, que es el precio a pagar por los Sony LinkBuds, no son precisamente pocos, pero al César lo que es del César: se comportan como unos auriculares de gama alta hechos y derechos. Si valoras la calidad de sonido y la versatilidad de sus funciones relacionadas con la comunicación, son una compra segura. Si prefieres cancelación de ruido, todavía mejor calidad de sonido y mejor autonomía, mejor valorar otras opciones.
8,3 Diseño8,75Calidad de sonido8,5Ergonomía8,5Experiencia de uso8,5Autonomía7,75
A favor
- Para ser abiertos, se escuchan muy bien.
- Son cómodos y muy ligeros.
- Tienen ecualizador integrado y muchas funciones para mejorar la comunicación.
En contra
- Puede que no sea cómodos para todos los usuarios.
- El micrófono se escucha con cierto matiz metálico.
- La autonomía no es la más alta.
Sony LinkBuds WF-L900 – Auriculares «True Wireless», Hasta 17.5 Horas de Batería, Optimizados para Alexa y el Asistente de Google, Micrófono Incorporado, Conexión Bluetooth, BlancoHoy en Amazon por 179,99€PVP en Worten 179,99€
Estos auriculares han sido cedidos para la prueba por parte de Sony.